En primera instancia la noticia de la suspensión a Román “Chocolatito” González por la Comisión Atlética de California causó un poco de sorpresa. No obstante, a lo interno en el equipo de Chocolatito no hubo ningún asombro. “Desde el 9 de septiembre sabíamos de la suspensión, pero no es más que un protocolo “, explicó el apoderado del tetracampeón, Carlos Blandón.
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Blandón reveló que no es la primera vez que la figura del boxeo nicaragüense ha sido suspendido. “Recuerdo que para el combate en Nueva York, después de los cabezazos que provocaron cortes en Román también tenía una suspensión hasta que se revisara, y por cierto tiempo para que la herida cerrara”, agregó Blandón. “Siempre antes de cada pelea los promotores te mandan una lista de exámenes médico que los peleadores deben hacer”, indicó.
El apoderado está más asustado sobre el enfoque que se le ha dado a “una formalidad”. ” Es algo rutinario después de un nocaut para que te den permiso en la siguiente pelea. No es nada malo ni grave. En el momento del combate venidero, una semana antes se hacen todos esos exámenes que piden. Entre los que recuerdo están los de sangre, resonancia magnética y de vista. Una vez realizados se le da la vía libre, así que no es nada alarmante”, comentó.
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El equipo de trabajo de Román espera hacerse los exámenes cuando se dé la siguiente pelea. “Román sigue entrenando normal y cuando se confirme su próximo combate se le harán los chequeos médicos respectivos y se le levantará la suspensión”, concluyó.
La suspensión indefinida
La Comisión Atlética de California había afirmado lo siguiente: “Román González está actualmente bajo suspensión indefinida. Él necesitará nuevas pruebas neurológicas para que sea levantada la suspensión. Con una suspensión médica, el boxeador no puede pelear en ninguna otra parte, hasta que se aclare su situación. Los exámenes deberán ser hechos por un médico en Estados Unidos”, aseguraron.