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Así luce Carlos Buitrago ya estando en la categoría de las 105 libras. LA PRENSA/CORTESÍA

Carlos Buitrago cumple con el prepesaje de la FIB y se coloca a 38 gramos de la categoría

Este viernes en Japón, Carlos Buitrago se levantó de la cama del Hotel Mystays Asakusa a las 6:00 a.m. y subió a su báscula, la cual se detuvo en 104.4 libras. Una hora más tarde, se realizó el prepesaje oficial de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) y el retador a la corona mundial de las 105 libras no defraudó: 105.38

Ya el buen augurio de estar cerca de la categoría estaba presente. Este viernes en Japón, Carlos Buitrago se levantó de la cama del Hotel Mystays Asakusa a las 6:00 a.m. y subió a su báscula, la cual se detuvo en 104.4 libras. Una hora más tarde, se realizó el prepesaje oficial de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) y el retador a la corona mundial de las 105 libras no defraudó: 105.38 en total, cuando el límite era 108.

A pesar de que todavía tiene que sobrevivir un día más, hasta el sábado, a la 1:00 p.m., cuando sea el peaje oficial del combate, Buitrago se siente fuerte en medio del sacrificio que significa permanecer en la categoría. Y posteriormente deberá comer con medida, debido a que en las reglas de la FIB ambos boxeadores deberán ser pesados en la mañana del día de la pelea, en donde solo pueden marcar 10 libras por encima de la categoría.

“Se sufre como suele hacerse por marcar la categoría. Pero te puedo asegurar que de todas las veces que he dado el peso, esta es la que menos me ha costado. Se debe a la entrega, a Dios y al apoyo de mi equipo de trabajo”, indicó Buitrago tras el prepesaje.

“Gracias a Dios estamos bien en el peso. Buitrago ha estado comiendo los tres tiempos, poquito pero no deja de ingerir alimentos”, señaló su apoderado Omar Álvarez, quien también acompaña al púgil.

Kyoguchi en 107 libras

No hay ninguna preocupación en el equipo de trabajo de Hiroto Kyoguchi, quien marcó 107 libras. Según se maneja desde Japón, el japonés no tendría ningún inconveniente en bajar las dos libras que tiene encima. Asimismo, el nipón —al igual que el pinolero— ha mostrado un físico imponente, bien definido y su semblante es el adecuado para alguien que se exprime para marcar el peso paja.

El originario de Osaka que entró al boxeo a los 12 años, practicando antes el karate en el gimnasio de su papá, fue claro en sus últimas declaraciones brindadas sobre cómo deberá afrontar el combate. “Yo buscaré el nocaut. Trataré de cazarlo con mi gancho de izquierda, que es mi mejor arma”, explicó para la prensa local.
Kyoguchi, además de ser boxeador, se graduó de la Universidad de Comercio. Le debe su evolución a Jyoichiro Tatsuyoshi, quien ha sido su adiestrador hasta la fecha.

Deportes Carlos Buitrago Hiroto Kyoguchi archivo

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